DESALOJADA LA NUEVA SEDE DE LA CNT EN ZARAGOZA

En la noche del 25 al 26 de febrero, la policía nazional ha desalojado la recién inaugurada sede de la Confederación Nacional del Trabajo – Asociación Internacional de los Trabajadores. Esta había sido abierta al público el sábado 23 al término de una manifestación que coincidía con otra convocatoria de muchos otros colectivos contra lo que llaman “golpe de estado financiero”.

La experiencia les ha durado dos días, literalmente. ¿Qué se ha sacado en claro de esta experiencia? Que en la CNT se sigue funcionando como siempre. Adelante y sin cabeza. Frenos y distracciones que parten de los veteranos, para quemar y espantar a los nuevos. Salvo el hecho en sí, okupar, todo lo demás de vergüenza, afortunadamente ajena, para los que escriben.

Empezando por el día escogido: después de dos años dando la brasa con la “unidad obrera” y las movilizaciones “unitarias”, por encima de la coherencia, el día en que los trabajadores están protestando en la calle, la CNT en lugar de estar en la lucha con ellxs, aprovecha que la poli está atareada para buscarse un local, vaya ejemplo de solidaridad, luego se preguntarán que por qué están solos. Aunque tampoco sorprende el cambio de estrategia, ya que no hay plataforma ni foro donde ya no tengan calado al flamante Secretario de Acción Sindical del Comité Confederal, a su maestro y discípulos.

Continuamos con la justificación. La CNT no okupa porque está en contra de la propiedad privada y está dispuesta a combatirla mediante la expropiación. La CNT okupa porque le exige al estado derechos de propiedad o usufructo sobre inmuebles. Toma ya con estos anarcosindicalistas.

Y es aquí donde cualquiera que haya pasado por este simulacro de sindicato sabe lo que ha sucedido. Toda la militancia que se juega el tipo, actúa engañada en esta acción. Los veteranos les alimentan la idea de que reclamando el Patrimonio Sindical Acumulado (PSA en adelante) la okupación irá sin problemas, y nada más lejos de la realidad.

El asunto del PSA lo tiene saldado la administración con la CNT desde hace cuatro años, como viene recogido en el BOE, con la permuta del local de la calle Centro en el barrio de Casablanca. Dicho local debe ser compartido entre CGT, USO y CNT, y como acordaron estas organizaciones, el local no será ocupado por ninguna de ellas, saldrá a subasta y con el dinero obtenido, una vez repartido equitativamente, cada sindicato invertirá en el local que desee. Hasta el momento ha salido dos veces a subasta sin aparecer comprador hasta la actualidad. Por otro lado, y según acuerdo de pleno de regionales de la CNT, si se obtuviese de la administración dicha pasta, iría al fondo de Patrimonio del Comité Nacional, a cuenta, según la regional Norte, de la deuda que tiene Zaragoza con la Confederación por el pago del local de Miguel Servet, ratonera insalubre donde las haya. Este acuerdo, además, es ridículo y una burla a toda la Confederación, dado que por ley, la administración sólo compensa con locales en usufructo o medios para dotarse de los mismos en la localidad donde se proceda. Pero así se toman los acuerdos en la CNT.

Por este mismo motivo, al asociar la okupación a la concesión del PSA, obligan a la administración a elegir entre desalojarlos, o ceder automáticamente sendos edificios tanto a CGT como USO, un mal negocio si lo comparamos con el local de Casablanca ya acordado. No hay que rascarse mucho la cabeza por tanto, para saber lo que iba a suceder.

Cuando leemos el comunicado y notas de prensa del sindicato ante la apertura de la nueva sede,  nos encontramos con lo que viene siendo habitual en las crónicas a las que nos tienen acostumbrados. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia y se trata de un error a corregir. Mienten descaradamente a todos lxs trabajadorxs de la ciudad y sindicatos de la Confederación, dando a entender que es la administración quien lo cede voluntariamente en permuta y que van a hacer las mil maravillas, sabiendo que no va a ser así.

Lo más lamentable de todo ha sido el desalojo, idéntico al de San José de hace 3 o 4 años: esto es, pacífico y cediendo a la primera reclamación. ¿Qué chiste es éste? Se supone que hablamos de una organización con abogados, y toda una Secretaria Jurídica a nivel estatal para saber que sin una orden judicial -firmada por un juez- no hay desalojo, y para ésta hace falta una denuncia y juicio previo, siempre recurrible y con sus plazos. En cuanto llega un poli y les dice que salgan, la respuesta es patética “vale, pero no me pegues”. Vaya manera de echar por tierra el esfuerzo de la gente y de quienes han acudido de otras partes a apoyar la acción.

En cualquier caso tampoco apenará esto demasiado a la CNT, a la que le sobran los medios. Sin ir más lejos en 2009, la CNT de Zaragoza cedió amablemente a la administración un piso en la Avenida San José, porque no sabían que hacer con él. Pese a que el abogado del sindicato les informó que tenían derechos de usufructo sobre el local que fue sede sindical en los 90, y que  luego se transformó en taller de serigrafía del sindicato, y que por tanto, debían ser compensados o indemnizados antes de ser desalojados, el jefe convenció a la asamblea que era preferible regalárselo al Estado, argumentando que ya se le había dado suficiente uso, y no hacer ninguna reclamación.

Una acción vanguardista más, para tratar de colarse en la prensa a ver si así pescan a algún incauto que les pegue los carteles. En los últimos tiempos no paran.

Montar numeritos cuando otros se movilizan se está convirtiendo en su especialidad. Comenzaron tratando de ponerse a la cabecera de la manifestación de CCOO y UGT hace dos huelgas, continuaron con otro intento de convertirse en estrellas mediáticas, okupando el belen navideño de la plaza del Pilar en la siguiente. Cuando convoca la gente de las mareas ciudadanas y el 15-M más de lo mismo. Demasiados ejemplos de cómo vaciar de contenido acciones y discursos, para politiquear y hacerse fotos.