ERICH MÜHSAM "El hombre y el escritor" por Augustin Souchy


Erich Mühsam nació el 6 de abril de 1878 en Berlín, hijo de un propietario de farmacia, de origen judío. A las seis semanas fue llevado a Lübeck por sus padres. Se deseaba que el niño fuese farmacéutico para que entrase en el negocio y tuviese así asegurada una existencia material. Concurrió en Lübeck al Katharineum. Allí fue castigado por agitación socialista. El bachillerato lo hizo en Parchim y Schleswig-Holstein, y después entró a practicar la farmacia en Lübeck.

Obtenido su título de idoneidad ingresó en la farmacia de su padre. Pero mientras el joven farmacéutico hacia mixturas, ambulaban sus pensamientos por el dominio de la poesía, del teatro, de la literatura y finalmente de la política combativa. Eso hizo que un día cambiase dos recetas. En sus venas circulaba la sangre hirviente de un Pegaso; no tenía espíritu para quedar junto a las retortas y se rebelaba contra todo achatamiento mental. Lo inundaba todo con la sátira mordaz que brotaba de su espíritu. La composición de drogas era una ocupación demasiado aburrida para el ansia del joven fogoso, que no sentía en esa manipulación satisfacción alguna. Después de su desatención, que habría podido tener fatales consecuencias, interrumpió el mozo la carrera a que le destinaba su padre. Se dedicó a estudios literarios, y gracias al celo y a la dedicación que puso en evidencia, se convirtió pronto en un profundo conocedor no sólo de la literatura contemporánea, sino también de la literatura filosófica mundial.

Fue farmacéutico hasta los 24 años -según los informes que nos proporciona su compañera, refugiada en Praga después de su trágico fin-, ejerciendo algún tiempo en Berlín, a donde se fue a los 22 años aproximadamente.

I
En Berlín entró en contacto con el círculo de literatos y bohemios que se agrupaban en torno a los hermanos Scheerbart. El más viejo de los hermanos, que había conseguido ya fama y consideración, descubrió pronto las brillantes cualidades del joven Mühsam y trabó íntima amistad con él. Ambos intentaron editar una revista satírica común (1). Inició después Mühsam una revista humorística por su cuenta, pero la falta de medios hizo que suspendiera su aparición a los pocos números. Ambas publicaciones fueron mejor escritas que el “Simplicissimus” que se fundó poco más tarde en Munich y del que Mühsam fue asiduo colaborador.
Tenía 24 años aproximadamente cuando conoció a Gustav Landauer y colaboró ya en el “Sozialist”, destacándose como propagandista contra la socialdemocracia y el parlamentarismo. En 1906 se fue a Munich, el centro entonces de la Alemania literaria y artística. Allí se reunieron los pintores y literatos más famosos, los hermanos Mann, Lion Feuchtwanger, el dramaturgo Frank Wedekind y muchos otros. En ocasión de algunos viajes a Viena conoció Mühsam a Peter Altenberg y entró en relaciones con los círculos literarios vieneses. Su labor en los primeros tiempos se manifestó en poesías que se publicaron en diversas revistas y en un libro que apareció en 1904 con el nombre de “Die Wüste”. En 1905 estuvo en Ascona, donde encontró anarquistas internacionalmente conocidos, el economista austriaco Gumplowicz, el conocido médico de Zurich, Dr. Fritz Brupbacher, los hermanos Nacht, Bertoni de Ginebra y otros. Eso contribuyó no poco a su desarrollo hacia el anarquismo. Nos permitirnos transcribir el siguiente fragmento de una carta de su compañera: "En 1906 se trasladó Mühsam a Munich. Allí comienza su período más fecundo como poeta. En 1907 se publicó su segundo volumen de versos,“Der Krater”. Era colaborador de "Sim-
plicissimus” y de “Jugend” y apareció en los cabarets con asuntos satíricos de la época para ganarse el pan.Fundó el grupo anarquista Tat, en Munich. Ese grupo no quedó absolutamente inactivo. En ocasión de la gran desocupación en Munich (1909), confeccionó ese grupo unas octavillas que fueron pegadas en las paredes de la ciudad con este texto: "¡Desocupados, salid de las buhardillas! ¡Reuníos en Marienplatz! En pie y demostrad mudamente contra vuestra miseria." El día fijado se verificó esa demostración muda en Munich y paralizó completamente el tráfico a su paso. Los socialdemócratas repudiaron esa grandiosa demostración diciendo a los obreros: "No os dejéis llevar por provocadores sin escrúpulos". Pero se había logrado que la ciudad iniciase una serie de construcciones y la desocupación desapareció. El grupo "Tat" se había impuesto por misión hacer propaganda entre el llamado lumpenproletariat (el proletariado andrajoso, [sic]). Iniciativa suya fue la acción de entonces contra el consulado español cuando fue fusilado Francisco Ferrer... Después fue Mühsam a Berlín de paso y allí se le arrestó y se le procesó en Munich a él y a sus compañeros por perturbación del orden público. En ese proceso, gracias a la actitud del lumpen-proletariat hubo de ser absuelto por falta de pruebas. En abril de 1911 fundó la revista “Kaín”, que apareció regularmente todos los meses hasta agosto de 1914, no obstante las grandes dificultades financieras. Al estallar la guerra tuvo que suspender la aparición a causa de su lucha antimilitarista y contra el partido estatal de la socialdemocracia, de las polémicas contra el orden social, contra la policía y el puritanismo, pero ante todo contra la censura".

III
El espíritu del joven poeta no se contentó con la sola actuación literaria. Inmediatamente después del período en que Nietzsche, Ibsen, Tolstoi y Strindberg influenciaron la vida espiritual de Europa, un decenio después que Arno Holz creó el naturalismo en la literatura, con el cual la pobreza y la miseria de la gran ciudad, hasta entonces despreciada por los poetas como demasiado prosaica, se convirtió en objeto de la poesía lírica, ningún artista que aspirase a la libertad y a la veracidad podía dejar inadvertido el problema social. Mühsam reconoció tempranamente que toda creación espiritual y en especial la actuación de los literatos no podía divorciarse de la aspiración progresiva de la humanidad, y particularmente del proletariado, hacia la libertad y la justicia. Desde la primera hora de su labor no perteneció el joven poeta a aquella especie de estetas para quienes arte y literatura están allí por ellos y para ellos. Para Mühsam el arte era medio de expresión de la personalidad que lidiaba espiritualmente, y como la personalidad, tampoco podía desligar de la comunidad su actuación. La creación artística al servicio de la totalidad, en naturalezas sensibles como la de Mühsam, no podía pasar por alto las injusticia de la sociedad actual, la opresión de la personalidad por el Estado y la explotación de las grandes masas por el sistema económico capitalista. Mühsam puso acción literaria de poeta y dramaturgo al servicio de la lucha contra la opresión y la dominación, y lo exigió de los demás también. Mucho antes de que se pusiera de moda la consigna del arte proletario, en el período anterior a la guerra mundial y antes de la revolución rusa, pedía Mühsam que el arte se pusiera al servicio de la agitación socialrevolucionaria. Fue un precursor del arte político, que especialmente después de las revoluciones de la Europa central fue el centro de toda creación artística. Como se burlaba Mühsam de los llamados estetas puros con las palabras: No importa cómo se llaman, “locos o decadentes", así fustigaba la educación burguesa, cuyo fin principal consiste en educar a los jóvenes para la caza de la riqueza. No menos mordazmente atacó el reformismo socialdemócrata, que ya había crecido mucho antes de la guerra. La socialdemocracia alemana tuvo en el primer decenio de este siglo "triunfo sobre triunfo". En toda elección al parlamento tenía nuevo aumento de votos, pero con ese crecimiento horizontal perdió cada vez más en contenido socialista; de energía revolucionaria hacia mucho que no se podía descubrir nada en ella. La idea que el socialismo se puede realizar cuando el partido tenga la mayoría en el parlamento tras sí, sofocó toda otra ideología. Mühsam y sus amigos, que no estaban en las filas de los Sindicatos obreros y no pertenecían tampoco al partido, eran en sus opiniones mucho más radicales, en sus ideas y aspiraciones mucho más atrevidos que el gran partido. Era en parte una bohemia literaria que vivía sin prejuicios; se había emancipado de la concepción burguesa del mundo y estaba inspirada por la fe en la revolución social. Mühsam no sólo obraba con la pluma como literato, era también conferenciante y recitador generalmente de sus propios versos en cabarets y en teatros. Fue en un cabaret de Zurich donde Mühsam leyó por primera vez la poesía que se ha hecho famosa sobre el "farolero revolucionario", que desde entonces figura en el conjunto clásico de la poesía revolucionaria alemana. En esa poesía se muestra Mühsam ya el gran artista y creador de la palabra que más tarde le dio tanta fama y le hizo tan temido adversario.
Cambia la palabra "revolucionario" un poco y forma la palabra "revoluzzer" (algo así como revolucionista, con sentido despectivo) y expresa así por su genio poético creador la actitud inicua y ridícula de la socialdemocracia, que persigue supuestamente fines revolucionarios, pero en realidad tiene miedo a la revolución, miedo ante los propios objetivos que, para eludir la lucha, proyecta en las calendas graecas (2). La socialdemocracia no era un partido de verdaderos revolucionarios, sino de “revoluzzer”, falsos, embusteros y a lo sumo fatuos. La poesía habla de un revolucionista de oficio farolero que se unió con otros revolucionistas para hacer la revolución. Avanzaban airosos por las calles donde el farolero limpiaba los faroles de gas. Los revolucionarios echaron abajo los postes del alumbrado para hacer barricadas, y el farolero se puso a gritar que se respetasen sus faroles; como no le hicieran caso se retiró amargado a casa para escribir un libro a fin de armonizar la revolución con el respeto y la limpieza de los faroles. Todo eso dicho en un tono humorístico y de un sarcasmo (sic) hiriente.
IV
Por esa época escribió Mühsam su primer pieza de teatro, una obra cómica, “Die Hochstapler”, que apareció en 1906. Antes publicó sus impresiones de Suiza en un escrito que se imprimió con el pie de imprenta de Ascona. En los años siguientes hizo hablar mucho de sí al mundo artístico de Munich, por su vida libre, pero ingeniosa. Se desarrolló una bohemia en Munich, y Mühsam fue considerado como su cabeza. Ese título se lo debió a su humorismo preciso y a sus chistes certeros. Llevaba una barba obscura y cabello crespo y alborotado, y cuando aparecía en un cabaret se burlaba de los filisteos y de los ciudadanos pacíficos, y fue presentado en todas las caricaturas como el espectro del terror. En torno a su persona se difundían anédoctas, y aun cuando no todo fuese verídico, ello contribuía a que los buenos burgueses uniesen en su imaginación siempre algo monstruoso al nombre de Mühsam. Mencionemos algunas de las anédoctas para mostrar el espíritu que vivía en él.

Cuando se le dijo en un congreso obrero por una corresponsal socialdemócrata: "Pero Erich, hoy tienes un hermoso cuello limpio", respondió sin titubear: "Eso no importa, pequeña, cuando el corazón está sucio". Con esa respuesta desnudó la mentira de la moral burguesa: tras hermosas frases se oculta por lo general el más craso egoísmo, tras la camisa limpia un corazón sucio. Pero el hombre es el mismo, el que es villano no se ennoblece cuando trata de esconder sus villanías tras una apariencia bien cuidada. Eso era lo que decía en su lacónica respuesta.

Después de su primer obra dramática "Die Hochstapler" escribió la pieza satírica con el título "Glaube, Liebe, Hoffnung". En ocasión de una lectura de esa pieza en 1909, por Mühsam, en Berlín, escribió la "Nationalzeitung" sobre ella: "Erich Mühsam, el conocido lírico, cuyo modo de vida, según parece, ha fijado definitivamente el concepto popular del gitano literario para Berlín, se muestra más intensivamente enamorado del teatro de lo que se habría supuesto. Su primera obra, "Die Hochstapler", es seguida ahora de una segunda... Se trata del desarrollo grotesco de un pastor, de una bien cimentada existencia desarraigada hasta lo aventurero. Se pensará un poco en la gigante "Professor Unrat" de Heinrich Mann. Mühsam ha leído su obra en un círculo de artistas y ha recibido muchos signos de aprobación. Hay que ver ahora cómo juzgará el gran público esa atrevida pieza eróticoburlesca."

V
Por esa época era Mühsam colaborador de la revista "Morgen", editada por el profesor Werner Sombart, Richard Strauss, el gran historiador literario Georg Brandes y con la colaboración del poeta Hugo von Hofmannsthal, un semanario de la cultura alemana. En ocasión del asunto Eulenburg-Maximilian Harden, un proceso de escándalo que levantó casi tanto revuelo en Alemania como el affaire Dreyfus poco antes en Francia, tomó Mühsam abiertamente parte en favor del famoso publicista Harden y escribió un folleto de defensa con el nombre "Die Jagd auf Harden" en el que deja traslucir sus convicciones anarquistas. Condena allí la doble moral de la sociedad burguesa y se manifiesta en pro de una moral libre, pero responsable. Maximilian Harden, el más importante y más brillante publicista, informó en su revista "Zukunft", sobre ciertos acontecimientos en el ambiente próximo del emperador alemán. Escribió sobre los amigos personales de Guillermo II, el príncipe Eulenburg y el conde Moltke y sobre su "mesa redonda de Liebenberg" y presentó especialmente las amistades masculinas entre las personalidades nombradas bajo una luz singular. Hubo varios procesos en donde aparecieron a la luz del día historias homosexuales, falsos juramentos, y algunos meses de prisión para Harden, que por lo demás no tuvo que cumplir. En su folleto sobre este caso, presenta Mühsam, de treinta años, la moral como el acuerdo tácito de la gran mayoría sobre los límites de sus comunes intereses; de la mayoría que en base a su poder físico se llama totalidad. Lo que contrasta con el sentimiento y la voluntad de la masa es inmoral. La voluntad de la mayoría se ha creado recursos para imponerse y asegurarse autoridad incondicional. Son las normas y prescripciones públicas con sus funcionarios del Estado y de la Iglesia. Son las leyes fijadas por escrito, las órdenes, ordenanzas, penas con sus funcionarios de Dios y del rey, sacerdotes, gendarmes y diputados. Mühsam defendió la independencia de la personalidad e hizo propia la frase de Harden sobre la moral sexual: "El concepto de honor públicamente controlable solo llega hasta el ombligo; lo que ocurre más abajo, no importa a extraño alguno de derecha o de izquierda". Frente al gran proceso de costumbres y de escándalo, proclamó Mühsam en su lenguaje propio la completa "libertad genital", rechazando así la moral de la propiedad de la sociedad capitalista también en el amor.

Cuando Mühsam durante la huelga de las comunicaciones de Berlín, en otoño de 1932, entró en la redacción de un gran diario berlinés, preguntó a los redactores presentes: "Señores, ¿saben ustedes quien ha organizado la primera huelga de comunicaciones?..." Como no obtuviera respuesta aclaró Mühsam: "Pues sencillamente, Lisistrata", y se fue entre las risas maliciosas de los redactores.

El período de la ascensión burguesa de la socialdemocracia fue simultáneamente un capitulo de la decadencia de las ideas revolucionarias en el movimiento obrero alemán. Los anarquistas y localistas, después sindicalistas, eran demasiado débiles para impedir el empantanamiento del movimiento obrero. Cuando se hizo público en el ambiente del emperador alemán el conocido escándalo Eulenburg, no fue la socialdemocracia la que se puso a la cabeza de la lucha contra un sistema bestializado. Fue el más grande publicista del imperio. alemán, Maximilian Harden, el que levantó el hacha de la lucha en su "Zukunft". Cuando Harden fue perseguido por sus publicaciones y acusado, fue Mühsam el que rompió en su nobleza caballeresca lanzas por Harden, escribiendo el folleto "Die Jagd auf Harden", que apareció en 1908. Con eso se presentó Mühsam al público por primera vez como brillante publicista político, con lo cual no sólo se atrajo las simpatías de todos los hombres de pensamiento liberal, sino también la atención de las autoridades policiales y judiciales.

VI
Fue en esa época cuando Mühsam entró en más íntimas relaciones con Landauer. Este, lo mismo que Mühsam, un escritor distinguido, estaba ligado con los más fuertes lazos al proletariado. Hacia ya un par de decenios que estaba en la lucha por el socialismo libertario. Junto a su actuación literaria, la actividad principal de Landauer era la propaganda de la ideología anarquista en el proletariado alemán. Mühsam encontró en él un compañero de armas y un amigo, al que quedó fiel hasta el trágico fin de Landauer. Mühsam era anarquista por su sentimiento y por su ímpetu interno de libertad, antes de conocer las ideas anarquistas. El partido socialdemócrata y los sindicatos estaban demasiado cargados con el peso burocrático para que Mühsam pudiera adherirse a ellos. La idea de la necesidad del Estado fue rechazada por él; consideraba dañino y corruptor el parlamentarismo; combatía el militarismo. Con esas opiniones no había puesto alguno para él en las filas de la socialdemocracia estatalmente patentada. En cambio, los opositores en todos los dominios le interesaban mucho más y estaban más cerca de sus pensamientos. Cuando Gustav Landauer pronunció en 1909 su conferencia, que después se hizo famosa bajo el nombre de "Incitación al socialismo", fue Mühsam uno de los primeros y más entusiastas que se pusieron de parte de Landauer. Lo que Landauer dijo hace treinta y cinco años al proletariado alemán no había sido recibido de afuera. Landauer habla vivido desde hacía más de veinte años en el movimiento obrero y allí había combatido; era el reconocimiento de una experiencia de veinte años lo que resonaba en él y le imponía el derecho y el deber de hablar y de incitar al socialismo. Mühsam estaba desde hacia varios años en el circulo espiritual de las mismas ideas que Landauer proclamó, y continuó siendo uno de los portavoces más ingeniosos de la interpretación landaueriana del socialismo.

Landauer utilizó la palabra socialismo, pero le daba un sentido completamente libertario. La anarquía era para él la parte negativa, la negación de las formas actuales de dominio de la sociedad que se expresan en el Estado y el capitalismo y que son conservadas con ayuda de un sistema de opresión y de explotación centralista. Había que derribar esas formas y poner en su lugar nuevas formas socialistas. El socialismo era para él la parte positiva; significa reconstrucción libertaria de la sociedad humana. De particular valor en la Incitación de Landauer era la critica al marxismo, que revistió en formas clásicas y que aun hoy es aceptada por los obreros socialdemócratas decepcionados.

Landauer exhortó a la formación de asociaciones socialistas. Esas asociaciones debían terminar al fin con la eterna cooperación en los parlamentos, con los capitalistas y con el Estado; debían declarar la lucha a toda la sociedad capitalista en todos los dominios de la vida social, colocarse simultáneamente fuera de la vida capitalista y entregarse realmente a la edificación de la vida socialista.

Erich Mühsam formó en Munich un grupo local de la Liga Socialista de Landauer, como hemos visto ya. En sus cuadros pronunció conferencias ante los rechazados de la sociedad, ante el proletariado andrajoso, y les predicó el derecho a la vida, de que la sociedad les privaba. Esas conferencias fueron señaladas como subversivas contra el orden social autoritario y el fiscal cimentó un proceso contra Mühsam. En ese tiempo compuso la canción de la huelga general, que todavía hoy sigue siendo una de las canciones más vigorosas del proletariado revolucionario de Alemania. Fue cantada con la melodía de la canción francesa: "Nous ne voulons ni dieu ni maître", pero con un texto independiente. En un tiempo en que en el movimiento obrero alemán se discutía en pro o en contra de la huelga general, echó mano Mühsam al arpa y cantó al proletariado alemán la canción que perdurará siempre y será como un manifiesto ardiente en pro de la huelga general.

VII
En su revista "Kain" (1911-14) debía expresar la lucha contra un orden social que según él había salido de la generación de Caín. Esa revista fue escrita desde la primera a la última línea por él sólo. Bajo el título podía leerse: "No se desea colaboración. Todos los artículos proceden de la pluma del editor". Esa revista mensual se ocupaba de crítica social, de teatro y de critica artística. Pero superó el carácter crítico y propagó también las ideas anarquistas. Tenía la ventaja de encontrarse en todos los kioskos y librerías de las estaciones y era leída por un gran público, que de lo contrario nunca habría pensado en leer escritos anarquistas. La originalidad, el espíritu y el humorismo del editor y su fama como crítico teatral y como poeta festivo se habían difundido en toda Alemania; Erich Mühsam pertenecía ya al mundo literario e ideológico alemán. Después de un decenio de actuación no solo se había hecho conocido, sino que había contribuido no poco a hacer conocer las ideas anarquistas en un campo más vasto del que habría sido accesible sin él a la propaganda anarquista.

En ese espíritu actuó Mühsam como inquietador y descubriendo inexorablemente con su crítica mordaz los males del orden social capitalista hasta el estallido de la guerra. En julio de 1914 hubo de suspender la publicación de su “Kaín”. Su mentalidad no cambió, como la de muchos de sus colegas literarios. Permaneció fiel a sus ideales e intentó continuar también durante la guerra la lucha contra el militarismo. Pero se le opuso un mundo de incomprensión. Quedó primero solo, con pocos amigos anarquistas, especialmente con Gustav Landauer, en contacto permanente. Más tarde, cuando la guerra mundial no quería terminar todavía, aumentó el descontento hacia los gobernantes y se encontraron compañeros que se pusieron a su lado. Aspiraba a ganar a un número de personalidades conocidas para una acción en favor de la paz. La policía tuvo noticias y la consecuencia fue que durante la guerra fue colocado bajo vigilancia policial.

Pero llegó en 1918 el derrumbamiento en los frentes, y con él la revolución y para Mühsam fue una nueva fase de su actividad, un nuevo capítulo de la lucha en su vida tempestuosa.

 

AUGUSTIN SOUCHY

 

Capítulo titulado “El hombre y el escritor” de “Erich Mühsam: su vida, su obra, su martirio” del anarquista alemán Augustin Souchy (1892-1984), publicado por “Tierra y Libertad” en 1934.

 

(1) Aquí hay un poco de lío, porque se refiere a la comuna “Neue Gemeinschaft” fundada por los hermanos Hart (Heinrich y Julius), y a un proyecto con Paul Scheerbart en 1903, de una revista satírica que iban a titular “Des Vaterland”(La Patria).

(2) “Ad calendas graecas”, o sea, para un momento que no va a llegar nunca. 

 

 Ilustraciones:

I. Cartel publicitario de la revista "Simplicissimus", Múnich 1896, obra del ilustrador y pintor, Thomas Theodor Heine (1867-1948).

II. Portada de "Simplicissimus" nº 1 de 1910, Múnich. Ilustración de Thomas Theodor Heine (1867-1948).

III. Portada de "Jugend" nº 30. Múnich, 25 de julio de 1896. Ilustración de Hans Christiansen (1866-1945).

IV. "Die Hochstapler", publicado por primera vez en 1904. Portada de la edición de 1906 de R. Piper & Co., Múnich.

V. Portada de "Wüste, Krater,Wolken". Poemario de Mühsam, editado en 1914 por Paul Cassirer, Berlín.

VI. Portada de "Die Aktion", año XI  nº 3-4, Berlín 22 de enero de 1921. Retrato de Mühsam, xilografía del revolucionario Eugen Maria Karpf (1893- ¿?).

VII. Portada de "Kain", año IV - nº 1. Abril 1914, Múnich. 

 

 

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